Arambha Avastha

El Pranava OM debe ser entonado durante tres Matras (entonaciones prolongadas). Esto es apto para la destrucción de los pecados primitivos. El Mantra Pranava destruye todos los obstáculos y pecados. Por su práctica, el Yogui alcanza el "Arambha Avastha" (el principio o primer estado) . El cuerpo del Yogui empieza a transpirar. Cuando esto sucede se deberá secar bien con las manos. Ocurre también, a veces, un temblor corporal y otras hay en que el Yogui salta como la rana.


Ghata Avastba

Sigue luego el Ghata Avastha, el segundo estado adquirido mediante la constante práctica de supresión del aliento. Cuando una unión perfecta entre Prana y Apana, Manas y Budhi o Jivatma y Paramatma tiene lugar sin oposición, se lo denomina Ghata Avastha.

El Yogui puede ahora practicar solamente durante una cuarta parte del período prescripto anteriormente. Por la mañana y por la tarde practíquese tan sólo por un Yama (tres horas) y el Kevala Kumbhak una vez al día. El acto de retirar completamente los órganos de los objetos sensoriales durante la cesación del aliento, se llama Pratvahara.

Cuanto quiera que el Yogui vea con sus ojos, considérelo como el Atma; cuanto quiera que oiga con sus oídos, considérelo como el Atma; cuanto huela con su nariz, cuanto guste con su lengua, lo que toque a su piel, considérelo el Yogui como su Atma.

Es entonces cuando adquirirá diversos poderes, tales como la clarividencia, la clariaudiencia, la habilidad para transportarse a grandes distancias en un solo instante, la brillante oratoria, la habilidad de asumir la forma que desee, la de ser invisible y el poder maravilloso de transmutar el hierro en oro.

El Yogui que sea cuidadoso en la práctica del Yoga, logra el poder de levitarse a voluntad. Pero es precisamente en este momento cuando el Sabio Yogui debe pensar que esos poderes son obstáculos enormes para el logro del Yoga y por tanto nunca deberá deleitarse o recurrir a ellos.

Los Yoguis no deben ejercitar esos poderes delante de personas, cualesquiera sean ésta. Deben vivir en el mundo como el común de la gente, a fin de conservar esos poderes bien ocultos.

Es indudable que sus discípulos les harán frecuentes preguntas a fin de que exhiban esos poderes, guiados por la curiosidad que imprimen sus deseos.
La persona que se halla ligada a sus deberes (impuestos por el mundo) olvida la práctica del Yoga. Por tanto el practicante no deberá hacer, durante el día y la noche, ninguna otra cosa que Yoga, sin olvidar las palabras de su Gurú. De este modo, el que se hallare ligado constantemente a las prácticas yóguicas pasará el estado Ghata. Nada se gana con inútiles compañías con personas de mentes mundanas; de ahí la necesidad de apartarse con gran esfuerzo de ]as malas compañías y practicar el Yoga.


Parichaya Avastha

Entonces, al impulso de esa práctica constante, el Parichaya Avastha (el tercer estado) es logrado.

El Vayú o aliento, mediante ardua práctica, juntamente con Agni y mediante ininterrumpida meditación, penetra en el Sushumna.

Cuando el Chitta de alguien entra en el Sushumna junto con el Prana, alcanza el más elevado sitial en la cabeza, y cuando el Yogui, por la práctica del Yoga, adquiere el poder de la acción (Kriya Shakti) y penetra los seis chakras, alcanza la segura condición de Parichaya, y entonces, en verdad, ve el triple efecto de Karma.

Por tanto, destruya el Yogui la multitud de Karmas mediante el Pranava OM. Que cumpla el Yogui el "Kaya Vyuda", el místico proceso de ordenación de los diversos Skandas del cuerpo, a fin de extinguir sus Karmas previos y la consiguiente necesidad de un nuevo renacimiento. En tal momento, practique el Gran Yogui las quíntuples Dharanas o formas de concentración por cuyo medio ejercerá comando sobre los cinco elementos, disipando el temor a las injurias, cualquiera sea su procedencia.


Nishpatti Avastha

Éste es el cuarto estado del Pranayama. Mediante graduada práctica del Yogui alcanza el Nishpatti Avastha o estado de completa perfección, y al destruir todas las semillas del Karma bebe el néctar de la Inmortalidad. Ya no sentirá ni hambre ni sed; ni el sueño ni el desfallecimiento, logrando la más absoluta independencia. Podrá moverse doquiera desee; no renacerá jamás; se liberará de las enfermedades. la decadencia y la vejez y gozará de la felicidad del Samadhi. No necesitará ya ninguna práctica yóguica.

Cuando el habilidoso y tranquilo Yogui pueda beber el Prana Vayú colocando la lengua en la raíz del paladar, conocerá entonces las leyes de acción de Prana y Apana y devendrá con merecimientos para la liberación.

El estudiante de Yoga experimentará automáticamente todas esas Avasthas, una tras otra, así que avance en su práctica regular y sistemática.

Un estudiante impaciente no podrá experimentar ninguna de esas Avasthas con prácticas ocasionales.

Será menester una estricta observancia de la Mithahara y la Brahmacharya.


1 comentarios:

Templo de la KriyaYoga San Cristótal dijo...

ENTONCES QUE ES el par avastha del Kriya, por favor responder a:
japadrom@gmail.com

Publicar un comentario